redactorjosé lópez



lunes, 27 de septiembre de 2010

En el corazón del Desafío


Fieles a nuestra costumbre de ir por el propio camino, salimos temprano buscando el sitio o viendo el terreno para las imágenes que tomaríamos. Obviamente y como corresponde fuimos en Bici, unos 13 km hasta el puente de hierro que cruza el arroyo Cululú. Las únicas presencias a las 8.30 eran unos pescadores aficionados que habían hecho noche en el lugar en una carpa improvisada sobre la ribera sur del cauce. El chico Guilmar me contó de la lluvia nocturna y de las peripecias para subir al camino la camioneta que habían estacionado abajo. Como aún restaba una hora para que los corredores pasaran por nuestro puesto, ya que largaban a las 10, fuimos a recorrer el sendero del monte, en su segundo tramo, unos 3km por senderos a la vera del lecho. Agreste y rumoroso por el agua y los pájaros habitantes dueños de los citados paisajes, nos deleitamos tomando fotos para graficar tan bellos parajes visitados ocasionalmente por los pescadores. Muchos patos negros hacían su pesca en vuelo rasante y fue un espectáculo que nos es frecuente verlo en vivo. En este sitio el caudal de agua, que no era profundo, imitaba una cascada en tamaño menor. Cuando fue un cuarto de hora antes de las 1º llegaron vehículos y un grupo numeroso de espectadores y controladores a la zona del puente. Nosotros nos internamos en el monte y por allí pasó Adrián Cammisi que traía un fotógrafo de Infobiker (Bs. As.), Fernando Caballero, un joven muy amable con quien cambiamos unas palabras y nos dejó su tarjeta. A modo de folleto explicativo, por que de eso se trata nuestra forma de ser, quise dejar plasmado mi satisfacción por aquellos que pese al esfuerzo que significa una competencia como la que vivimos el domingo, llevan en su rostro una sonrisa. Y no son pocos lo que obran así y le hacen bien al deporte, porque la gente que los ve asume que un hecho físico que conlleva dureza, no quita la simpatía y el buen humor. Las personas que se llevaron el premio mayor en este sentido fueron Carina Mehring, Fabio Lorenzón, ese amigo de la barba de quien no recuerdo el nombre, luego Manuel Fontana, Juan André, el grupo de chicas de Rafaela, “Toronja” Vogt (Franck), Eva Kruse, también su esposo Roberto y hubo muchos más. Pero el señor que acompañaba a un muchachito con capacidad diferente y el mismo pibe, resultaron sin dudas para mí,  “la gran foto” de la carrera. (José López)




1 comentario:

Anónimo dijo...

AMIGO JOSE, TE FELICITO POR EL EXCELENTE COMENTARIO. SEGUI ASI!!! GRACIAS POR TU PAGINA.

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